Trabajar frente a una computadora, con papeles en la oficina, ensamblar piezas pequeñas detrás de una cinta transportadora durante mucho tiempo: todo esto cansa la vista y, tarde o temprano, puede provocar miopía. Sin embargo, el ejercicio simple pero regular no sólo puede ser una excelente medida preventiva contra la pérdida de visión, sino también prevenir enfermedades como las cataratas y el glaucoma.

¿Quién inventó los ejercicios oculares?
Ya en la antigüedad, los problemas de restaurar la visión preocupaban las mentes de grandes científicos, sacerdotes y pensadores. Poco a poco, mediante prueba y error, se creó un determinado sistema de ejercicios, cuyos ecos se pueden encontrar en las obras de Bates y otros autores. Muchos expertos critican estos sistemas de ejercicios, pero otros los consideran completamente razonables y aceptables.
En el desarrollo de los ejercicios oculares también participaron muchos oftalmólogos, en particular un profesor que trabajó durante muchos años en puestos directivos en el Instituto de Investigación de Enfermedades Oculares. Bajo su dirección también se desarrolló una serie de ejercicios destinados a mejorar la circulación sanguínea, normalizar la presión intraocular y aumentar la agudeza visual.
Actualmente, además de los ejercicios oculares habituales que puede realizar una persona, existen programas informáticos y métodos de hardware especiales para la corrección de la visión.
Ejercicios para mejorar la visión según el método del profesor.
Ejercicios generales de fortalecimiento. Aunque mucha gente cree que si se es miope basta con hacer unos pocos ejercicios oculares, resulta que el sedentarismo y la mala forma física contribuyen por sí solos a la progresión de la miopía. Lo contrario también es cierto: el ejercicio diario y el trabajo físico moderado son excelentes medios para prevenir la pérdida de visión.
En los años 80 del siglo pasado, se descubrió que los siguientes tipos de actividad física ayudan a fortalecer el músculo ciliar del ojo y mejorar la circulación sanguínea, si el pulso está en el rango de 100 a 140 latidos por minuto:
- corriendo;
- caminando;
- esquiar;
- nadar.
Sin embargo, al realizar los mismos ejercicios con una frecuencia cardíaca de 180 latidos por minuto, así como al saltar la cuerda, gimnasia y acrobacia, se observa una progresión de la miopía debido al deterioro de la acomodación y la circulación sanguínea del ojo.
¿Cómo puedes determinar tu frecuencia cardíaca para obtener los mayores beneficios visuales al correr o caminar? Por supuesto, puede simplemente medir con instrumentos especiales o contar el número de latidos del corazón durante 10 segundos y luego multiplicarlo por 6. Si esto le parece difícil, puede utilizar el siguiente método: la actividad física se considera moderada si una persona es capaz de hablar en frases cortas y abruptas durante los deportes. Si la carga es demasiado pesada, lo que resultará perjudicial para los ojos, la respiración es suficiente para pronunciar sólo palabras cortas, por ejemplo, "sí", "no", "no sé", etc.
ejercicios especiales

Se dividen en tres grupos: para mejorar la circulación sanguínea y la acomodación, así como para fortalecer los músculos oculares.
Ejercicios para mejorar la circulación sanguínea y normalizar la presión intraocular.
El objetivo de estos ejercicios es que periódicamente debes hacer con los ojos:
- parpadea con frecuencia (por ejemplo, durante un cuarto de minuto), luego haz una breve pausa para descansar y repite nuevamente 4 veces;
- cierra los ojos durante 5 segundos (hazlo 8 veces);
- Masajee suavemente los ojos a través de los párpados cerrados durante 1 minuto y luego repita presionándolos 3-4 veces con tres dedos durante un segundo.
Ejercicios para fortalecer los músculos oculares.
Los músculos del globo ocular se fortalecen y mantienen bien su forma si movemos suavemente la mirada sin girar la cabeza:
- verticalmente arriba-abajo, abajo-arriba;
- a lo largo de una, luego la segunda diagonal en dirección de arriba a abajo;
- horizontalmente de izquierda a derecha;
- girar en el sentido de las agujas del reloj y viceversa.
Es recomendable realizar casi todos los ejercicios de este bloque hasta 10 veces.
Ejercicios para la agudeza visual.
Los ejercicios de este grupo se basan en mover la mirada de cerca a lejos y hacia atrás (mientras la mirada se fija en cada posición durante 3-5 segundos). Podría ser:
- llevar el dedo índice a la altura de la nariz hacia la cara (para que su imagen se doble) y retirarlo con el brazo extendido;
- mirar una marca de color a la altura de los ojos en la ventana y mirar un objeto distante ubicado a lo largo de nuestra línea de visión durante 5 a 7 minutos diarios.
Ejercicios útiles y divertidos para niños.

No todos los niños pueden realizar estos ejercicios varias veces al día. Y aquí es donde vienen al rescate los juegos que entrenan la acomodación de los ojos y fortalecen sus músculos. Es importante excluir aquellos juegos en los que existe una alta probabilidad de golpes en la cara, colisiones, esfuerzos fuertes o esfuerzos.
Las siguientes actividades pueden reemplazar en gran medida los ejercicios "aburridos" para los niños y ayudar a mejorar la visión:
- carrera corta y rápida (parchear, ponerse al día);
- atrapar y pasar la pelota;
- lanzar una pelota (una pequeña bolsa de arena) contra una pared o un objetivo en el suelo.
Durante el horario escolar, aproximadamente a mitad de lección, es recomendable parpadear rápidamente durante 30 segundos y luego sentarse durante 1 minuto con los ojos cerrados, mientras se recuesta en la silla.

























